Día del perro en Argentina
El 2 de junio de 1983, Chonino, un ovejero alemán de la Policía Federal, caminaba junto a su compañero, el oficial Luis Silbert, en las inmediaciones de la avenida General Paz, en la Ciudad de Buenos Aires. El oficial Silbert vio a dos personas en actitud sospechosa frente a una vidriera de un comercio, y al solicitarle la documentación, los delincuentes extrajeron sus armas y se generó un tiroteo. Al ser herido, el oficial de policía le dio la orden de ataque a Chonino, quien se abalanzó sobre uno de los agresores y lo redujo. Lamentablemente, el otro malviviente advirtió esto y le disparó al perro, dándole en el corazón y matándolo en el acto, para de esta forma darse a la fuga ambos ladrones.
Al llevar el cuerpo de Chonino, los policías advirtieron que entre sus dientes tenía un pedazo de tela, que resultó ser un bolsillo de la camisa del delincuente que tenía su documento de identidad dentro. Gracias a esto, cinco días después del hecho la policía pudo finalmente detener a quienes le habían dado muerte a tan leal compañero.
Nacido en 1975, este ovejero alemán había sido entrenado como perro de seguridad. Ya los dos años formaba parte del cuerpo de la Policía Federal como perro de presa.
Luego de la muerte de Chonino -cuyos restos descansan en el panteón de la Policía Federal junto al de su compañero Luis Silbert, quien falleció en 2007-, se le colocó el nombre del can a la calle de ingreso a la División Perros de la Policía Federal, un pasaje que corre entre la Avenida Casares y la Avenida Jerónimo Salguero, en los fondos del predio de la Policía Montada. También dentro del predio una estatua de bronce recuerda a este héroe que dio su vida por defender a su compañero.
Con respecto al “Día del perro”, si bien a nivel mundial se conmemora el 21 de julio, en nuestro país la iniciativa surgió por parte de la periodista Cora Cané, y es a partir de 1996 que nuestro país instauró este día en honor a Chonino.
