Halterofilia, un deporte “pesado”
Esta actividad deportiva -desconocida para muchos-, es uno de los deportes más antiguos. Hay registros de que ya en el año 3600 antes de Cristo en China los emperadores realizaban competencias y diferentes ejercicios de fuerza.
Pero no es hasta finales del siglo XIX, cuando este deporte es incluido en los Juegos Olímpicos de Atenas -en el año 1896- que comienza a tener más difusión. De esta manera, de esa época son las primeras asociaciones nacionales y también es en este momento cuando comenzaron a realizarse los primeros campeonatos mundiales.
En nuestro país la disciplina no posee -lamentablemente-, una gran difusión. También podemos decir que en los últimos años se ha producido el recambio generacional de aquellos deportistas que tan bien representaron al país en años anteriores, entre los que podemos nombrar a Darío Lecman y Gustavo Majauskas en la década del ´90, y sin olvidarnos del gran precursor de la disciplina en nuestro país: Humberto Selvetti, quien en el año 1951 obtuvo el record mundial de levantamiento y es considerado como uno de los halterófilos más importantes del siglo XX.
El profesor César Pollaroli es Entrenador Nacional de Levantamiento de Pesas, y con él dialogamos para conocer el presente de este deporte en nuestro país, como así también cuál puede llegar a ser el futuro de la halterofilia en la Argentina.
Magazine Digital: ¿Qué es la halterofilia?
Prof. Pollarolli: La halterofilia o levantamiento de pesas es un deporte olímpico que consiste en levantar una barra con discos con el mayor peso posible en dos movimientos o técnicas; uno es el arranque, donde se sube el peso en un solo movimiento hasta tenerlo sobre la cabeza con los brazos extendidos, y otro es el envión, donde se carga la barra al pecho y luego se eleva sobre la cabeza. Para lograr esto, en competencia se disponen de 3 intentos en cada movimiento, y hay una variante entre las competencias mundiales dónde se premia a los mejores en arranque, el envión y el total, que es la suma de los dos movimientos y los juegos olímpicos, donde se premia la suma total de los pesos. El reglamento de las competencias hace que los torneos sean bastante entretenidos, por la tensión y los nervios de cada participante.
MD: ¿A qué edad se puede empezar a practicar?
PP: Se puede empezar a practicar a cualquier edad, nunca es temprano ni tarde para comenzar. En la parte competitiva se recomienda comenzar entre los 10 y 12 años, que es donde se tienen las máximas posibilidades de aprovechar el potencial del deportista. En cuanto a la parte amateur, se puede disfrutar de la práctica teniendo siempre en cuenta las limitaciones en el rendimiento, ya que es un deporte que exige una gran coordinación y movilidad y el amateur va a necesitar adaptar los movimientos a sus limitaciones.
MD: ¿Cuáles son las potencias mundiales en este deporte? ¿Cómo está Argentina a nivel mundial?
PP: Claramente en este último tiempo la potencia es China. Después hay un reparto de medallas entre países de Europa del Este y Asia, como Georgia, Kazajistán, Irán, Corea del Norte, entre algunos otros.
En cuanto a nuestro país, lamentablemente el nivel de Argentina es de los más bajos, aunque con algunos posibles proyectos a futuro. Tengamos en cuenta que tuvimos 2 cuartos puestos en los Juegos de la Juventud que disputaron en Buenos Aires en 2018, lo cual puede darnos la esperanza de que si se trabaja bien desde ahora, ese pueda llegar a ser el semillero de grandes halterófilos en un futuro no tan lejano.
MD: ¿Quiénes son los referentes hoy en día en nuestro país?
PP: Según mi criterio, creo que el referente más cercano sería Joanna Palacios, que participó en los Juegos Olímpicos de Río 2016. También hay buenos proyectos, como Jonathan Leyes, que resultó 4º en los Juegos de la Juventud, María Laura Cassadeval, que también obtuvo el 4º puesto en los mismos juegos de 2018, Abril de Cándido, que fue 6ª en el Mundial Juvenil y Gerónimo Lema, Campeón Nacional en los Juegos Evita 2019.
MD: ¿Hay un desarrollo serio de este deporte en Argentina?
PP: Este deporte nunca fue muy atractivo en nuestro país, lamentablemente. En este momento hay varias escuelas de iniciación distribuidas en todo el territorio nacional, y el deporte forma parte de los Juegos Evita a nivel nacional, de modo que pienso que con suerte y trabajo se subirá el nivel. Considero que el mayor obstáculo es la poca difusión y los prejuicios de practicarlo en edades de iniciación adecuada, que sería entre 10 a 12 años. También los movimientos se están conociendo por el crossfit, disciplina que surgió hace algunos años en nuestro país, pero eso en sí mismo no redunda en un gran beneficio, como sucedió en Estados Unidos, por ejemplo, ya que está práctica atrae a gente de mucha más edad.
MD: ¿Cuál sería la mejor forma de hacer crecer este deporte en Argentina?
PP: Creo que la popularidad de este deporte va a ser a largo plazo, y dependerá también de que haya muy buenos resultados a nivel mundial. También podría influir el hecho de desarrollar uno o dos deportistas que sean referentes, para de esa forma seguir creciendo, pero para eso se tienen que juntar el talento y las ganas del deportista con el conocimiento y la infraestructura necesaria para su desarrollo, cosa que hoy por hoy veo muy difícil.